viernes, 12 de diciembre de 2008

Kitsch


La palabra kitsch se origina del término alemán yidis etwas verkitschen. Define al arte que es considerado como una copia inferior de un estilo existente. También se utiliza el término kitsch en un sentido más libre para referirse a cualquier arte que es pretencioso, pasado de moda o de muy mal gusto.


Historia

Aunque su etimología es incierta, está ampliamente difundido que la palabra se originó en los mercados de arte de Munich entre los años 1860 y 1870. El término era usado para describir los dibujos y bocetos baratos o fácilmente comercializables.
Otra palabra alemana kitsch está asociada al verbo kitschen, que significaba ‘barrer mugre de la calle’. El kitsch apelaba a un gusto vulgar de la nueva y adinerada burguesía de Munich que pensaba, como muchos nuevos ricos que podían alcanzar el status que envidiaban a la clase tradicional de las élites culturales copiando las características más evidentes de sus hábitos culturales.
Lo kitsch empezó a ser definido como un objeto estético empobrecido con mala manufactura, significando más la identificación del consumidor con un nuevo status social y menos con una respuesta estética genuina. Lo kitsch era considerado estéticamente empobrecido y moralmente dudoso. El sacrificio de una vida estética convertida en pantomima, usualmente, aunque no siempre, con el interés de señalar un status social.
Tal vez un ejemplo clásico de ello es la arquitectura y el arte decorativo desarrollado en el área de Los Ángeles en California durante las décadas 10 al 30 del siglo XX cuando la zona vivió un gran desarrollo económico debido a la agricultura y el éxito de la industria cinematográfica de Hollywood lo que creo una generación de gente emigrada de europa recién adinerada que intentaron recrear el estilo de los nobles europeos lo que dio pie a la creación de mansiones en las que se mezclaban caóticamente estilos como el barroco, florentino, gótico y el rústico usado en las misiones de la misma California, este estilo fue llamado Californiano; en la decoración se crearon piezas estrambóticas como chimeneas de más de tres metros de altura, falsos escudos nobiliaros, tapetes de oso, espejos gigantescos con marcos de falsa madera tallada estofada realizados en plástico o cuadros idílicos de falsos antepasados que decoraban sus paredes; se llegó al exceso de comprar antiguos castillos europeos que eran trasladados piedra por piedra a los Estados Unidos o la compra de títulos nobiliaros en subasta.

Andrés Serrano


es un fotógrafo estadounidense que se ha convertido en uno de los más notorios a través de sus fotografías de cadáveres, además de su polémico trabajo "Piss Christ", una fotografía de un crucifijo sumergido en un vaso con la orina del propio artista.

Serrano, de raíces hondureñas y afro-cubanas fue educado como católico. Estudió desde 1967 a 1969 en el Brooklyn Museum and Art School, y vive y trabaja en Nueva York.
Su trabajo ha sido expuesto en lugares tan variados y prestigiosos como la Catedral de Saint John de Nueva York, el Barbican Arts Centre de Londres y en la Colección Lambert Avignon.

La obra de Serrano como fotógrafo suele ser en forma de ampliaciones de 0.5 por 0.8 m, producidas con técnicas fotográficas convencionales (sin manipulación digital). Ha tratado un vasto conjunto de temáticas incluyendo retratos de miembros del Ku Klux Klan, fotos de cadáveres, e imágenes de víctimas quemadas.
Muchas de las fotografías de Serrano contienen fluidos corporales, tales como sangre (a veces del ciclo menstrual), semen (por ejemplo, "Blood and Semen II" (1990)) o leche materna. Dentro de esta serie hay numerosos trabajos de objetos sumergidos en estos fluidos. El más famoso de ellos es Piss Christ" (1987), un crucifijo de plástico inmerso de un vaso de orina. Esta fotografía causó una gran polémica la primera vez que fue expuesta. Serrano, como otros artistas como Robert Mapplethorpe, se convirtió en una figura atacada por producir arte ofensivo, mientras que otros lo defendieron en nombre de la libertad artística.
La obra "Blood and Semen III" se usó como portada del disco Load de la banda de heavy metal Metallica, mientras que la obra "Piss and Blood" se usó en ReLoad.

Lewis Carrol


Lewis Carroll es el seudónimo por el que es conocido en la historia de la literatura Charles Lutwidge Dodgson (Daresbury, Cheshire, 27 de enero de 1832 - Guildford, Surrey, 14 de enero de 1898), sacerdote anglicano, lógico, matemático, fotógrafo y escritor británico, conocido sobre todo por su obra Alicia en el país de las maravillas.

En 1856, Dodgson descubrió una nueva forma de arte, la fotografía, primero por influencia de su tío Skeffington Lutwidge, y más tarde de su amigo de Oxford Reginald Southey y del pionero del arte fotográfico Oscar Gustav Rejlander.
Dodgson alcanzó pronto la excelencia en este arte, que convirtió en expresión de su personal filosofía interior: la creencia en la divinidad de lo que él llamaba belleza, que para él significaba un estado de perfección moral, estética o física. A través de la fotografía, Carroll trató de combinar los ideales de libertad y belleza con la inocencia edénica, donde el cuerpo humano y el contacto humano podían ser disfrutados sin sentimiento de culpa. En su mediana edad, esta visión se transformó en la persecución de la belleza como un estado de gracia, un medio para recuperar la inocencia perdida. Esto, junto con su pasión por el teatro, que le acompañó durante toda su vida, habría de traerle problemas con la moral victoriana, e incluso con los principios anglicanos de su propia familia. Como anota su principal biógrafo, Morton Cohen: "Rechazó rotundamente el principio calvinista del pecado original y lo sustituyó por la noción de divinidad innata".

La obra definitiva acerca de su actividad como fotógrafo (Lewis Carroll, Photographer, de Roger Taylor (2002)), documenta exhaustivamente cada una de las fotografías de Lewis Carroll que se han conservado. Taylor calcula que algo más de la mitad de su obra conservada está dedicada a retratar a niñas. Sin embargo, debe ser tenido en cuenta que menos de un tercio de la totalidad de su obra se ha conservado. La niña que más veces le sirvió de modelo fue Alexandra Kitchin("Xie"), hija del deán de la catedral de Winchester, a la que fotografió unas cincuenta veces desde que tenía 4 años hasta que cumplió 16. En 1880 intentó fotografiarla en traje de baño, pero no se le permitió. Se supone que Dodgson destruyó o devolvió las fotografías de desnudos a las familias de las niñas que fotografiaba. Se creía que se habían perdido, pero se han encontrado seis desnudos, de los cuales cuatro han sido publicados y dos se conocen apenas. Las fotografías y esbozos de desnudos que Dodgson realizaba alentaron la suposición de que tenía tendencias pedófilas.
La fotografía le fue también útil como entrada en círculos sociales elevados. Cuando logró tener un estudio propio, hizo notables retratos de personajes relevantes, como John Everett Millais, Ellen Terry, Dante Gabriel Rossetti, Julia Margaret Cameron y Alfred Tennyson. Cultivó también el paisaje y el estudio anatómico.
Dodgson abandonó repentinamente la fotografía en 1880. Después de 24 años, dominaba completamente el medio, disponía de su propio estudio en el barrio de Tom Quad, y había creado unas 3.000 imágenes. Menos de 1.000 han sobrevivido al tiempo y a la destrucción intencionada. Dodgson registraba cuidadosamente las circunstancias que rodeaban la creación de cada una de sus fotografías, pero su registro fue destruido.
Su obra fue reconocida póstumamente, junto a la de Julia Margaret Cameron, gracias a su reivindicación por parte de los fotógrafos del pictorialismo, así como al apoyo del Círculo de Bloomsbury, en el que se hallaba Virginia Woolf. En la actualidad, es considerado uno de los fotógrafos victorianos más importantes, y, con seguridad, el más influyente en la fotografía artística contemporánea.

Richard Avendon


Reputado fotógrafo de moda y gran retratista comenzó su carrera profesional en los años cincuenta realizando espléndidos trabajos de moda para la revista Harper's Bazaar, donde acabó convirtiéndose en Jefe de Fotografía. Posteriormente, habría de colaborar igualmente con otras revistas como Vogue, Life y Look. Sin duda alguna, fue el gran fotógrafo de la moda durante los años sesenta y setenta. En sus trabajos consiguió elevar la fotografía de moda al rango de lo artístico, al conseguir acabar con el mito de que los modelos debían proyectar indiferencia o sumisión. Por el contrario, en sus fotografías los modelos eran personajes libres y creativos en sus gestos dentro de escenarios dinámicos y bajo esquemas compositivos previamente decididos.
En los años sesenta Avedon se reveló como un artista comprometido con las inquietudes sociales de su tiempo. Durante el año de 1963 fotografió el Movimiento por los Derechos Civiles en el Sur de los Estados Unidos, colaborando en los siguientes años con James Baldwin en el libro “Nothing Personal”. A finales de los sesenta y principios de los setenta, Avedon realizó reportajes sobre líderes militares y víctimas en la guerra de Vietnam y manifestaciones anti-guerra en los Estados Unidos para el New York Times. En la Navidad de 1989-1990 marchó a Berlín para documentar una ciudad dividida en dos mundos diferentes la noche en que caía el muro.
Sus retratos, aparentemente sencillos pero profundamente psicológicos, de personalidades famosas y desconocidas posando frente a un inmaculado fondo blanco, muestran a un cuidadoso fotógrafo capaz de plasmar en papel fotográfico rasgos inesperados de los rostros de personajes de la envergadura de Truman Capote, Henry Miller, Humphrey Bogart o Marilyn Monroe, entre muchos otros. Su método era sencillo pero efectivo, la derrota anímica del contrario fotografiado a través de largas y cansadas sesiones de hasta cuatro horas. Así desnudo, el retratado e indefenso era capaz de mostrar su personalidad más sincera.
En el año 1979 comenzó el que habría de convertirse en uno de sus trabajos más importantes. Por encargo del Museo Amon Carter, de Fort Worth (Texas), Avedon dedicó cinco años a recorrer el Oeste de los Estados Unidos para documentar a las personas que nunca escribirían la historia de su país. En esta obra, titulada In the American West, nos presenta a granjeros, mineros, vagabundos, prostitutas, amas de casa, presos, vaqueros de rodeo o empleados de pequeñas oficinas, etc.; en fotografías de gran formato tomadas con luz de día, al aire libre y como siempre, ante un fondo blanco. Nada hay en ellos del sueño americano o de la tierra prometida, pero son retratos de individuos que han sido observados y artísticamente elevados por la cámara de Avedon mediante una composición sobria, logrando así una considerable fuerza expresiva.
Al término del proyecto, Avedon había recorrido un total de 189 poblaciones en 17 estados; había fotografiado a 752 personas utilizando alrededor de 17,000 placas de película. De ésta colección, escogió 123 retratos que conformarían la serie In The American West 1979 – 1984
Además del gran formato utilizado para sus fotografías de moda o retratos, desarrolló una obra en paralelo, utilizando el paso universal, que refleja sus vivencias más personales, como viajes o recuerdos familiares.
Algo muy profundo subyace a lo largo de toda la obra de Avedon y, sin embargo, no siempre se ha acertado a concretar en los trabajos realizados en torno a su figura. Es una preocupación sincera, pero a veces elegantemente obsesiva. El tiempo, la vejez y sus tensiones, resulta ser el motivo fundamental en la obra de Avedon. Vemos en su arte cómo nos habla directamente del paso del tiempo y su influencia en el ser humano, y, cómo no, del camino hacia la muerte. Son esos retratos descontextualizados que aparecen ante la cámara sin maquillaje, fatigados o tristes, tal y como se encontraban en ese momento, los que claramente denotan esta inquietud. El final de su libro Portraits (1976), por ejemplo, culmina de forma tremenda pero magistralmente tratada con una serie de siete fotografías de su padre envejeciendo gradualmente hasta que parece haberse integrado en la luz que le rodea.
El 25 de septiembre de 2004 Avedon sufrió una hemorragia cerebral en San Antonio Texas, mientras se encontraba en una sesión fotográfica para un proyecto encargado por The New Yorker, el cual se titulaba On Democracy, y se enfocaba en el proceso electoral del 2004 en los Estados Unidos; se trataba de retratos de candidatos, delegados de las convenciones nacionales, entre otros involucrados en el tema. Murió en la misma ciudad el 1º de octubre de ese año a consecuencia de las complicaciones médicas.

Félix Nádar


Nadar es el nombre artístico del fotógrafo francés Gaspar Félix Tournachon,nacido en París en 1820 y fallecido en 1910. Sus fotografías buscan la capacidad de fijar el sujeto para la posterioridad, algo que en su época estaba reservado a otras especialidades artísticas.En Francia es un mito y haber sido fotografiado por Nadar un gran honor. En el resto del mundo, esta considerado como el gran fotógrafo del siglo XIX.Nadar prefirió dedicarse a retratar a políticos, científicos o escritores antes que abordar las temáticas de moda. Sin embargo, no le dio la espalda a las nuevas tendencias, y fue uno de los primeros galeristas en prestar su propia sala para exposiciones impresionistas.

Manuel Álvarez Bravo


Nació en Ciudad de México el 4 de febrero de 1902. Reconocido por plasmar el paisaje y la gente de su país con maestría y originalidad.
Su padre fue un profesor, que de vez en cuando se dedicaba a la fotografía y a la pintura. Álvarez Bravo, antes de dedicarse a la fotografía fue burócrata en varias dependencias, intentó estudiar contaduría, pero en 1915 inició su camino hacia en el quehacer artístico y se inscribió en la Academia de San Carlos para estudiar arte y música.
A pesar de estos estudios, Álvarez Bravo siempre ha sido considerado como autodidacto. Su primera influencia importante en el universo de las imágenes la tuvo en 1923 al conocer al fotógrafo alemán Hugo Brehme, quien lo incitó a comprar su primera cámara. Para 1925 obtuvo su primer premio en un concurso local en Oaxaca. Iniciaba pues, la historia de uno de los padres de la fotografía Mexicana. En el mismo año, contrajo matrimonio con Lola Martínez de Anda, quien años más tarde, asumió la misma profesión.
Por aquellos tiempos conoció a Tina Modotti, Diego Rivera, Pablo O'Higgins, entre otros. Estas amistades lo estimularon ideológica y políticamente hacia el carisma social que distingue toda su obra: plasmar la cultura e identidad mexicanas, con una visión que va más allá de una simple documentación, adentrándose con gran imaginación en la vida urbana y la de los pueblos, los campos, la religión, el paisaje y las tradiciones.
En 1930 Tina Modotti fue expulsada de México por sus afiliaciones comunistas, y le heredó a Álvarez Bravo su trabajo en la revista Mexican Folkways fotografiando a los muralistas de la época.
Ese mismo año se volcó por completo a la tarea fotográfica y en 1932 realizó su primera muestra individual en la Galería Posada. En esa época compartió exposiciones con el famoso fotógrafo francés Henri Cartier-Bresson en las salas del Palacio de Bellas Artes, fascinando a André Bretón, quien descubrió en su trabajo un surrealismo innato.
La amistad con Bretón fructificó en la portada del libro "Catálogo de la exposición Surrealista Internacional" (1939) con textos de Bretón y en 1935? una exposición en París que sería trascendental en su trayectoria artística.
En 1936 expuso en la Galería Hipocampo del poeta mexicano Xavier Villaurrutia. Durante este periodo se adentró en la experiencia de nuevas soluciones que lo apartaron por completo del lenguaje visual desarrollado por los artistas de la lente que lo antecedieron, empleando elementos que dan mayor énfasis a la capacidad para evocar imágenes, a través de los sugestivos títulos de sus fotografías, basadas en la cultura y en la tradición mexicanas, que denotan una gran perspicacia y, en ocasiones, un fino sentido del humor.
La década de los cuarenta, marcó el inicio de Álvarez Bravo en el mundo del cine con !Que Viva México! (Eisenstein, 1930), y participó en rodajes con personalidades como John Ford y Luis Buñuel. Asimismo, en 1944, fue realizador del largometraje Tehuantepec, y de los cortometrajes Los tigres de Coyoacán, La vida cotidiana de los perros, ¿Cuánta será la oscuridad? (con el escritor José Revueltas) y El obrero (con el también escritor Juan de la Cabada). Es en esta década cuando consolida su madurez artística (que aún perdura), mediante recursos tales como la yuxtaposición, el aislamiento de detalles y el ordenamiento con rigor geométrico. Ello dio como resultado el manejo simultáneo de lo familiar y lo inesperado, generando una ambigüedad que invita al espectador a ver con nuevos ojos las cosas cotidianas y a construir su propio significado.
Durante una larga trayectoria nacional e internacional, Álvarez Bravo acumuló experiencias, premios, reconocimientos, exposiciones, incluso gran parte de su labor ha consistido en reunir y dar a conocer importantes colecciones fotográficas, así como la creación del Primer Museo de la Fotografía en México. Dentro de sus premios destacan los siguientes: Premio Nacional de las Artes (México, 1975), Condecoración oficial de la Ordre des Arts et Lettres Français, en 1981, Premio Víctor Hasselblad (Suecia, 1984) y el Master of Photography del ICP (Nueva York, E.U.A, 1987).
Falleció el 19 de octubre de 2002 a la edad de 100 años.

martes, 9 de diciembre de 2008

3 elementos importantes y determinantes para la fotografía

  • Luz
  • Película
  • Cámara

Principales factores que determinan la iluminación:

El origen: Encontramos fuente de luz natural y artificial.

El número de fuentes: Influye sobre el contraste y el modelado de la imagen.

Un flash es muy poderoso que 20 lámparas prendidas.